Es difícil dar una definición de Reiki, que por un lado describa correctamente los beneficios que aporta y que al mismo tiempo no espante a personas con mentalidad muy científica o a personas con mentalidad poco abierta.
Reiki es una práctica espiritual, que no religiosa, en la que se consigue:
- canalizar energía externa a nuestro cuerpo y a nuestro aura, llamada ki o Qui (energía vital)
- dirigir esa energía para que al atravesar nuestro cuerpo o el cuerpo de un paciente, pueda desactivar los bloqueos energéticos que nosotros o nuestro paciente posea y se produzca una circulación del ki correcta por nuestro cuerpo, y por tanto éste sane.
Con el Reiki, se consigue, mediante la imposición de manos, ayudar a que las personas sanen al recibir una energía que produce que el estado vibratorio de las moléculas aumente su frecuencia y provoque que células enfermas sanen al vibrar a frecuencias superiores.
Soy consciente que estas palabras sean imposible de digerir para una mente científica, pues yo nunca creería estas afirmaciones, si no fuera por las experiencias que he vivido y que te contaré en este blog.
Te recomiendo que veas el apartado acerca de la demostración de la existencia del ki.
Reiki es una filosofía o estilo de vida, que se basa en:
- Recitar 5 normas fundamentales llamado GOKAI todos los días, con el compromiso de cumplirlas cada día.
- Realizar meditación todos los días que nos sea posible, para mejorar nuestro estado anímico
- Realizar terapias de auto-sanación con cierta frecuencia
- Realizar terapias de sanación a los prójimos, siempre que nos lo soliciten
Las cinco normas fundamentales del Reiki y que componen el GOKAI son:
- Sólo por hoy no me enfadaré,
- Sólo por hoy no me preocuparé.
- Sólo por hoy trabajaré duro y honestamente.
- Sólo por hoy daré gracias.
- Sólo por hoy seré amable con los demás y conmigo mismo.
Cada una de estas reglas, tiene un valor muy importante en la consecución de la felicidad
El aprendizaje del Reiki se divide en tres niveles y la Maestría. Coloquialmente se conocen como Nivel I, Nivel II, Nivel III y Maestría, aunque ciertamente sus nombres son Shoden, Chuden, Okuden y Shinpiden respectivamente.
Es importante saber que es necesario la Sintonización de un Maestro en cada uno de los niveles para poder desarrollar las facultades inherentes a cada Nivel, y también es importante saber que el hecho de recibir la Sintonización no es más que la siembra de la semilla, y que es necesario un trabajo personal del alumno para potenciar las capacidades recibidas en el acto de la Sintonización.
Para lograr tener éxito con la práctica del Reiki, para mí hay tres palabras claves: Fe, paciencia y perseverancia.
Ante todo, es necesario que tanto el terapeuta como el paciente tengan la convicción y fe de que la práctica del Reiki se traducirá en resultados de sanación que en la mayoría de los casos es inexplicable, con la lógica del mundo científico en el que vivimos.
También es necesario tener paciencia.
En primer lugar, los resultados de una sesión de Reiki se pueden mostrar durante los tres días siguientes a la realización de la sesión.
En segundo lugar, y en especial a los terapeutas de nivel I o Shoden, puede pasar un largo tiempo hasta que notan que la energía es canalizada por ellos, y al no observar resultados inmediatos, estos terapeutas que no llevan mucho tiempo probando el Reiki, desisten de continuar, pensando que no son aptos para el Reiki
Nada más lejano a la realidad; todos y cada uno de nosotros estamos capacitados para ser terapeutas Reiki y sanar a nuestros prójimos. Sólo debemos creerlo.
Por último hay que perseverar. Hay que trabajar a diario, practicando la meditación siempre que se pueda y dedicándonos a limpiarnos y cuidarnos a nosotros mismos, haciendo ejercicios de autolimpieza, siempre que podamos, para estar en mejores condiciones para practicar Reiki con nuestros prójimos.
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